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2012/02/01

La secuela menospreciada: Beyblade Metal Fusion

Si preguntase a mis amigos y conocidos acerca de las series que marcaron su infancia, las respuestas variarían mucho: la época y la región condicionaron mucho estos aspectos cuando éramos niños. Desde luego, las series de nuestros padres no son para nada las mismas que las nuestras (en su mayoría), e incluso los que tenemos la misma edad veíamos cosas muy diferentes de pequeños. Hay respuestas bastante comunes, como las series de Hanna-Barbera que todos hemos visto alguna vez. Ya entre los jóvenes se escuchan respuestas más modernas que, en mayor o menor grado, todos conocemos: Doraemon, Shin-chan, Los Caballeros del Zodíaco, Dragon Ball, Digimon, El Inspector Gadget, Pokémon, Oliver y Benji … (Sí, la gran mayoría de las respuestas son anime.) Hay series de mi infancia con las que muchos se identifican, y otros que ni han oído hablar de ellas, como Reena y Gaudi (Slayers en japonés), Let’s & Go (Bakusou Kyoudai) o Flint y los Viajeros del Tiempo (Flint, The Time Detective). Pero, sin lugar a dudas, una de las series más recordadas es Beyblade.


¿Recordáis a Tyson, Max y los demás?
Conocí Beyblade muy de refilón, la verdad; trataba de verla los fines de semana por la mañana en Antena 3, pero no la llegué a pillar muchas veces y no me enteré bien del argumento. Así y todo, me gustaba mucho: la ambientación (recuerdo que un montón de chavales en el patio traían su cutrebeyblade y echaban peleas en las que las peonzas casi ni se llegaban a tocar XD), el diseño de personajes y, sobre todo, las alucinantes Bestias Bit que habitaban dentro de los trompos asesinos. Probablemente, este grato recuerdo fue la razón por la que cogí Beyblade Metal Fusion con tantísimo gusto.

Logo de Beyblade Metal Fusion.
Metal Fusion no tiene mucho que ver con la serie original, lo que probablemente sea la razón por la que muchos renieguen de ella casi sin pensárselo ni darle una oportunidad. Sin embargo, yo no me paré a pensar en ello cuando comenzaron a emitirla en TeleCinco (cadena que, desde que dejó de emitir series de dibujos y anime, tengo desintonizada de mi televisor). Y, ciertamente, me lo he pasado genial con esta revisión de uno de los animes de mi infancia, tanto como disfruté en su día de Digimon Tamers y Digimon Frontier y tanto como estoy disfrutando ahora mismo de Savers/Data Squad. Podéis matarme, so escépticos, pero a mí me parece genial. Viva Gaomon, cagüenla. No he tenido una Digibitch así de grande desde Tentomon y Armadillomon.

Beyblade Metal Fusion cuenta la historia de Gingka Hagane (no os voy a mentir, no sé si es Gingka o Ginga, pero me quedo con la primera porque lleva K y las Ks molan), un joven blader (o persona que pelea con beyblades) que busca mejorar para cumplir la tarea que su padre no pudo completar y falleció tratando de realizar: utilizando el antiguo beyblade de su progenitor, Storm Pegasus, Gingka tiene el cometido de derrotar a Lightning L-Drago, un bey que, a lo largo de la historia, ha pasado por muchas manos malignas y ha acabado convirtiéndose en un instrumento de destrucción. La malvada organización de los Nebulosas Oscuras roba a L-Drago de la Aldea del Bey, lugar donde vive Gingka y escondite donde el bey había sido encerrado.

Logo japonés, para que comparéis. Esto es Metal Fight Beyblade.
Así, Gingka viaja por el país buscando rivales fuertes contra los que enfrentarse para mejorar tanto su técnica como los poderes de su Pegasus con el único propósito de que, al final, pueda llegar a derrotar a L-Drago. Durante su camino, Gingka encontrará numerosos amigos y enemigos: entre sus aliados se encuentran Kenta Yumiya, un joven e inexperto blader que admira muchísimo a Gingka; Madoka Amano, joven técnica de beyblade que, si bien no lucha, es una experta en el funcionamiento de las batallas y los beys, o Kyouya y Benkei, que comienzan como sus rivales y acaban por convertirse en dos de los mejores amigos de Gingka. Sus rivales son también muchos y variopintos: entre ellos, Tetsuya Watarigami, apodado “El Cangrejo”, un blader débil y tramposo que sólo es capaz de ganar mediante juego sucio, aunque es más una molestia que un peligro; Daidouji “Douji”, jefe de los Nebulosas Oscuras, un hombre extraño que ambiciona el poder de L-Drago; o Ryuuga, miembro estrella de los Nebulosas por ser el portador de L-Drago y quien realmente lo controla, lo que le convierte en el auténtico rival a batir. Hay muchos personajes más, pero prefiero que los descubráis vosotros mismos; creedme, no tienen desperdicio.

Los buenos: Gingka, Kenta, Madoka, Benkei y, por supuesto, Kyouya.
Si os digo que voy a hablar de un tema espinoso, deberíais saber al momento que voy a tratar de comentar el apartado visual y sonoro. Empezaré diciendo que, lamentablemente, Beyblade Metal Fusion no sólo ha perdido su nombre original al llegar a nuestro país (Metal Fight Beyblade), sino que, arrastrado por ello, también nos hemos quedado sin su opening y ending originales, los cuales he escuchado posteriormente y molan bastante. En su lugar, tenemos un ending basado totalmente en créditos en el que tenemos que dar las gracias por el mero hecho de que le hayan puesto música de fondo e imágenes sueltas bañadas en colores azules. El opening se salva un poco: es la típica sucesión intercalada de recortes del anime y del opening real, con una canción que sólo se da un aire a la original, pero que al menos está doblada al español. Aunque sea, como de costumbre, una sintonía en la que básicamente te hablan de la serie en sí, se agradece escuchar algo en cristiano en vez de en chorringlés. Y la letra no está mal.

Opening japonés:

Hablemos ahora del apartado visual, que supongo que podré comentar mejor ya que tengo los ojos menos atrofiados que el oído. Ante todo, debemos tener en cuenta que hablamos de un kodomo o anime para niños; los recursos que se utilizan para este tipo de series son, generalmente, menores (o eso tengo entendido), así que hablaré desde las limitaciones que esto conlleva. Dentro de lo que cabe, el estilo visual es muy resultón y bonito: los beyblades están genialmente diseñados en 3D durante los combates, aunando en perfecta armonía los entornos y los espíritus de los beys, representados con un dibujo normal, con el tridimensional giro de las peonzas. Además, los combates importantes son todo un espectáculo, mucho más trabajado que el resto de peleas, como viene siendo habitual en este tipo de animes. El diseño de personajes es, por su parte, llamativo y exagerado, como en la gran mayoría de kodomos (lo cual se eleva a la enésima potencia en el manga).

Opening en español:

Además, algo que me llamó bastante la atención es el matiz oscuro que toma el anime para tratarse de un kodomo. Ryuuga es un personaje malvado y despiadado, que destruye y absorbe el alma de sus rivales sin compasión alguna, sumiendo en tinieblas a todo aquél que se le enfrenta. Este estilo sombrío le da otro toque a la segunda mitad de la serie, convirtiéndola en algo más que un simple entretenimiento que un niño ve para pasar el rato. Aunque de planteamiento simple e inocente, Beyblade Metal Fusion es un anime que podría pasar perfectamente por un shounen de acción o aventuras. Desde luego, no sería lo más raro que se ha visto en las páginas de la Shounen Jump...

Las auras de poder que rezuman de los personajes son un clásico de los combates importantes.
Lo cierto es que he visto está serie muy a trompicones, pero no por falta de ganas, eso desde luego. No sé si alguna vez lo he explicado, pero las series que grabo de la televisión y yo tenemos una relación muy especial: yo voy acumulando vídeos y más vídeos que, posteriormente, recorto para dejar tan sólo los capítulos en sí. Sin embargo, no tengo ningún método para saber qué contiene cada uno de esos archivos hasta que no lo miro, y entonces, ya que estoy, lo recorto. Así, es bastante difícil avanzar tan sólo en una serie, ya que el material que consigues es, por llamarlo así, totalmente aleatorio. No me quejo; eso me permite no dejar nada de lado, pero también me hace avanzar muy lentamente. Eso, sumado a que Boing no es la reina de la velocidad en lo que respecta a dar nuevas temporadas (AÚN ESPERO LA SEGUNDA DE DINOSAUR KING, CACHO CABRONES, y si volvéis a dar la primera antes, tanto mejor), y el hecho de que mi cabezonería me impida verlas por mi cuenta y mucho menos verlas subtituladas, dan un resultado muy poco provechoso para mí. Pero soy así de hardcore.

Storm Pegasus es el auténtico héroe de este anime.
Aún con todo, siempre que pillaba un capítulo de Beyblade, me apresuraba a verlo en cuanto tenía la oportunidad, y es que la serie me ha tenido enganchado de principio a fin a pesar de las dificultades como pocas lo han conseguido (¿alguien dijo Inazuma Eleven?). El carisma de Gingka, el querer saber qué pasa después y antes (¿he comentado que he visto los capítulos DESORDENADOS?) y el hecho de querer acabarla rápido para empezar a ver la segunda parte, llamada Beyblade Metal Masters (Metal Fight Beyblade: Baku en Japón), me han arrastrado a una espiral de adicción tan solo comparable a la que generaría un bey girando a toda potencia en el fondo de una piscina.

No hay Bestias Bit pero, en su lugar, en Metal Fusion todos los beys tienen el espíritu de su respectiva constelación en su interior.
En resumidas cuentas, Beyblade Metal Fusion es un anime que sorprende gratamente para lo que podría esperarse de él en un principio. No es una obra maestra, desde luego, pero merece que se le dé una oportunidad. Dejando a un lado la poca similitud que comparte con su antecesora, Metal Fusion se presenta como un anime interesante, divertido y que entra muy bien, si me permitís el símil culinario. La versión española, además, está muy cuidada (a excepción de lo que venimos arrastrando por partir de la adaptación inglesa), no habiendo ninguno de esos temidos cambios de doblador a mitad de la serie (que recuerde LOL) que tanto y tanto nos molestan a los que buscamos productos de calidad. Puede que a veces los combates se hagan cortos, se centren demasiado en la conversación entre los beligerantes más que en la acción en sí, o que ciertos capítulos parezcan más relleno que de la trama principal, presentando personajes fuertes pero que no volverán a aparecer; pero, de cualquier modo, nos encontramos con una obra que nos hará recordar las aventuras de Tyson y compañía y, por qué no, soltar alguna lagrimilla con los momentos tensos. Todo tipo de sentimientos tienen cabida dentro del Bey Stadium y del espíritu de un blader, así que sacad el lanzador y dejad que todos ellos extiendan sus alas y vuelen alto. ¡Let it rip!


Ficha técnica:
Título: Beyblade: Metal Fusion (Metal Fight Beyblade / メタルファイト ベイブレード)
Categoría: Serie - Animación manga
Género: Aventuras/Deportivo, kodomo
Año: 2009-2010
Duración: 51 capítulos, 20 mins. por capítulo aprox.
Guión: Katsumi Hasegawa
Estudio: Tatsunoko Productions / Synergy SP / Seven
País de origen: Japón
En España: Sí


Lo mejor:
-Beyblade, totalmente renovado; un poco de aire fresco que le sienta bien a un clásico.
-Personajes chachis, graciosos y carismáticos.
-Combates más emocionantes de lo que cabría esperarse de unos trompos chocando. (XD)
-Estilo visual muy correcto.


Lo peor:
-Que te eche para atrás que ya no estén Tyson y los demás.
-A veces deja muy de lado el combate para centrarse en los que combaten en sí.
-Que no nos hayan llegado los openings y endings, sobre todo éste último: a mí es que los créditos metidos así de golpe y sin vaselina me ponen malito.


Nota: 7,5

3 comentarios:

  1. Hola~
    Primero llego a decir que elegí esta entrada de todas tus trillones de entradas porque (ya me leí la IE Strikers) era gran fanática de Beyblade cuando chica (y lo sigo siendo, en especial de Kai y Rey >w<). Debo decir que mucho no puedo comentar sobre Metal Fusion porque, siendo sincera, nunca la seguí de cerca. A pesar de eso, vi algunos capitulos al azar (conociéndo a Kyouya >w< ) y me encantaba el opening (no me acuerdo del ending xD). Sin embargo, cómo bien dice por aquí, echaba de menos a Takao (Tyson) y compañía, quedando sólo su escencia en la secuela. Ehm, no sé qué más comentar, así que ojala seas feliz con esto ^^ Muy bien escrito todo, igual que todo lo que escribes. Suerte con tu blog :P

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    1. Paopaopao~ Cómo me alegra verte por aquí también.
      Yo no seguí la original de cerca, pero siempre me gustó lo que vi. Metal Fusion se centra más en la lucha contra el mal que en combates en sí (creo recordar que no había nada contra lo que luchar de verdad en lo que vi de la serie original); vamos, que, sobre todo tras la primera mitad de la serie, pelean casi siempre por salvar el mundo, no en sí por diversión.
      ¡Claro que me encanta el comentario! >.< Muchas gracias por el halago y los ánimos, trataré de darte más lectura pronto.

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  2. yo he visto las dos series la primera me encanto es decir metal fusion, pero luego la original me dejo marcada, ambos personajes de las dos series me encantaron,pero en mi opinion tendrian que haber sacado la original antes que la otra. Ojala algun dia hagan una pelicula o un serie en la que aparescan estas dos grandes series y ambos protagonistas,junto a ryuga,antes de que pasara lo de su muerte.

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